En Busca
del
Plan Maestro

Mayo, 19, del 2020. En sueños, estaba en un gran barco. Allí, había toda clase de actividad como la conocemos en el mundo entero. En este barco había todo tipo de placer y entretenimiento. Allí vi muchas personas conocidas y no conocidas, ¡las personas estaban felices de estar ahí! Vi que había diferentes reuniones, los que estaban allí, en esas reuniones, y los que presidían las mismas, yo pude identificarlos, ¡y eran adventistas del séptimo día! Yo les oía comenzar las reuniones muy alegres, pero, pasado un rato, esto se convertía en tristeza y asombro. {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p1}

Me acerqué a una de ellas para ver de qué hablaban; pero, el que hablaba, calló al verme. Más una dama junto a la cual me senté me dijo: “hermana, debe hacer algo, de aquí no bajaremos sin que nos trastornen”. A lo que le contesté: “¿por qué subió a este enorme bote?” Me contestó: “hace 30 años que vivo en él. Esta es mi casa, y siempre fue seguro; pero, ahora, no lo sé”. Le dije: “pues, es la hora de bajar de él”. Me dijo: “¿cómo? ¡es imposible!” Le dije: “para Dios no hay nada imposible”. Así terminamos la conversación y fui a otro lugar, donde se llevaba a cabo otra reunión dentro de aquel enorme bote. {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p2}

Al acercarme, el que hablaba me miró desconfiadamente y luego dijo: “no es problema; a estas alturas, lo que sucederá, sucederá”. Así continuó su discurso. Al abrir su boca dijo: “todos, aquí, somos una familia, y como familia tenemos el deber de ayudarnos unos a los otros”. Todos dijeron: “sí, somos una gran familia”. Así que, el que hablaba, continuó y dijo: “tengo aquí dos cartas que nos harán muy poderosos. Pero, antes, tráiganme una pizarra”. Vi cuando trajeron una pizarra, y él comenzó a escribir: “división por unión, hombre o mujer, sábado o domingo”. “Todas estas barreras”, dijo, “caerán y seremos una gran familia de paz, amor y lealtad de unos a los otros, ¿qué les parece?” él preguntó. Y todos respondieron: “¡amén!” Prosiguió diciendo: “¡ya no habrá más problemas económicos, sociales y religiosos! Dios no da un remanso de paz”. Y todos gritaron: “¡amén! ¡aleluya!” {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p3}

En ese momento, alcé mi voz y dije: “¡no!, ¡no escuchen esto! ¡no proviene de Dios, este no es su plan! ¡esto es obra del enemigo! ¡este tipo de unión no es aprobada por Él pues viola sus principios eternos!” A lo que contestó el que dirigía la reunión: “ya nosotros, los directores, lo hicimos, y véannos, ¡estamos bien y felices! No hay nada que temer; si estamos bien es porque Dios lo aprueba. Vengan a esta fila y entren a ese anfiteatro. Allí se les dirá qué hacer”. Todos se pararon e hicieron la fila. ¡No lo podía creer! Comencé a correr entre ellos y les exhortaba [a] que no lo hicieran, ¡pero todo fue en vano! Mis ruegos y súplicas no les hicieron desistir. Sólo la dama que estaba sentada a mi lado no fue a la fila, y ésta me llevó a otro lado de aquel gran barco para que viera lo que estaba pasando allá, también. ¡Y veíamos las enormes filas por doquier! {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p4}

La escena cambió, y fui introducida a un sótano bien oscuro, un sótano que estaba debajo de aquel gran barco. Allí vi un ser alado, vestido de negro, y su rostro: arrugado como una pasa seca. Éste tenía una capucha con la cual tapaba, por momentos y secciones, su rostro. Al verlo, fue tanto el impacto que, deseaba salir corriendo de aquel lugar, pero mi acompañante me dijo: “no temas, debes ser testigo de esto”. Quedé ahí, observando. Él trabajaba con tubos de ensayo, sustancias líquidas, y unos polvos, y los mezclaba. Pregunté: “¿qué es eso? ¿qué hace?” Se me dijo: “es un arma”. Dije: “¿un arma? ¿cómo un arma?” Me dijo: “mira”. Allí vi una enorme pizarra y cosas escritas en ella. Me acerqué. Vi muchas fórmulas que yo no entendía, pero, entre ellas, un diagrama que entendí al leerlo, y éste decía, para mi gran asombro: {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p5}

Al leerlo exclamé: “¡qué horror! ¡líbranos Señor!” Se me dijo: “todo esto se fragua en la oscuridad, y desde las oscuras profundidades sale a los laboratorios del mundo”. Amados, ¡fue horrible aquello! {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p6}

Pero fui llevada a otro lugar. Era un lugar de adoración que era masónico. Y, sin tocar tierra, suspendida en el aire, pude observar cómo ese ser alado que estaba en aquel enorme sótano, de aquel gran barco, era adorado. Éste tenía, en su enorme mano, un vaso transparente lleno de un líquido rojo, y lo bebía rápidamente. Frente a él, en el aire, una pantalla se suspendía, y una cifra de números avanzaba. Pregunté: “¿qué significa esto?” Y él me contestó: “su sed de sangre no se sacia jamás, y él vigila atentamente el conteo de cada una de sus víctimas”. Dije: “¡Oh, qué horror!, ¡deténgalo!” Me contestó: “ésta es su hora”. {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p7}

Volvimos al enorme barco, y allí vi a todos los que había visto antes, como distraídos, su mente estaba lejos; yo les hablaba, pero no me contestaban, sólo me miraban y se reían. {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p8}

Fui a otro lado del barco, y vi una calamidad fuerte: muchos que luchaban por ponerse en pie sin lograrlo, y se arrastraban. Pregunté: “y esto, ¿por qué les sucedió?” Me contestó: “¿viste las filas enormes?” Contesté: “sí, las vi”. Me dijo: “ven, te mostraré”. Entramos al lugar de las filas, y veía cómo cada uno era inyectado, y luego pasado por dos caminos, según un detector, con una luz que cambiaba [el] color que indicaba. La luz, a veces, era verde y, otras veces, era roja. [Inmediatamente que] los vacunaban, pasaban por esta luz. El que ponía la luz verde era llevado a un lugar diferente al que la luz le salía roja. Luego, fui llevada a un lugar donde vi la división de ambos grupos. [A quienes] la luz les había salido verde, estaban de pie, y [a quienes] la luz les había salido roja, estaban gateando sin poder pararse. Dije: “¡oh, Señor! ¿cómo escapar de esto?” Me contestó: “id a las montañas por la razón correcta: por amor y obediencia a Dios. Preparaos para aguantar, en todo lo posible, el impacto. Internaos en ruego y oración ante el Altísimo y Él peleará la batalla de sus fieles. ¡Apresuraos, el tiempo es corto! Sembrad”, me dijo. “Comed puro, trabajad al aire libre, debajo de los árboles, todo lo que más podáis. No toméis agua proveniente de las ciudades. Buscad al Señor de todo corazón y Él os guiará; y seréis preservados”. {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p9}

En ese momento, amados, desperté. ¡Qué terrible sueño! ¡fue tremendo aquello! Todavía, en mi mente, cierro los ojos y puedo visualizar aquellas cosas que vi en aquella pizarra y ese ser tan terrible que pude presenciar, ver, en ese momento. Amados, esta guerra no es contra sangre ni carne. Amados, esta guerra es contra potestades en los aires. Quiera Dios que podamos entender y nos demos cuenta que lo que está en juego es nuestra alma. Quiera Dios que podamos entender y que podamos apresurarnos a cumplir la voluntad del Señor, ¡porque la voluntad del Señor es nuestra salvación! Si realmente queremos algo, si realmente sentimos que debemos tener algo de conveniencia en nosotros, lo que nos conviene es seguir las huellas del Maestro, para que así podamos llegar a puerto seguro; pero, antes de esto, que podamos ser cubiertos por sus alas. Que el Señor nos bendiga. {Daisy Escalante: 19-05-2020 #01, es.p10}