Testimonio
14-09-2019 #01
(La Tempestad se Acerca)

Amados, 14 de septiembre del 2019. En sueños, yo me veía en un lugar, ese lugar estaba muy concurrido, era como una ciudad pequeña. Yo les exhortaba a salir de ahí, pero muchos se reían y me daban la espalda. Otros, unos pocos, comenzaron a avanzar, pero paso a paso, muy lento. Sólo 4, de todos los que allí estaban, aligeraron sus pasos. {Daisy Escalante: 14-09-2019 #01, es.p1}

Comenzamos a salir de la llanura, pasamos por entre medio de casas, y escuchamos una voz que nos dijo: "suelten los animales". Los soltamos para que fueran libres, porque entendíamos que ante todo lo que venía, ellos debían buscar refugio y luchar por su vida. Seguimos subiendo camino hacia las montañas, vi que eran cordilleras, porque veía muchas montañas que cubrían gran territorio a lo largo. Mientras íbamos subiendo miré hacia atrás porque sentí un ruido muy fuerte. Al mirar, vi cómo una gran tempestad comenzaba a destruir lo que estaba en la llanura. Corrimos hacia arriba y nos entramos en cuevas que encontramos, y otros se agarraban de fuertes árboles porque la tempestad era grande. Aún allí, refugiados, sentíamos temor por nuestras vidas ante el ciclón tan grande que arrasaba la llanura, más gracias a Dios la tempestad no nos hizo daño. Miramos luego a la llanura y no quedaba nada en pie. Sufrimos mucho al ver esto porque allí había muchas personas [a quienes] les habíamos exhortado, y no nos quisieron hacer caso; y ya no existía nada en aquel lugar. {Daisy Escalante: 14-09-2019 #01, es.p2}

Mientras estábamos sufriendo, el sueño cambió. Y, luego, me vi en un salón grande. Había una mesa larga. Allí vi todo tipo de literatura de Ministerios Independientes. Vi de: "Los Mensajes de los Tres Ángeles", solamente leía sus títulos en las portadas. Vi otro que decía: "Alimentación", otro, "Muerte al yo", otro, "Guardar el sábado como Dios lo requiere", otro que decía: "La vestimenta". Otro hablaba de "El Santuario"; otro, leí que decía: "La Bestia y el sistema que lo representa". Y así, cada uno de los panfletos tenía títulos muy interesantes. Mientras yo los hojeaba, otros se acercaban a ver estos panfletos. Yo veía que eran de muchos años atrás, y yo agarraba uno de cada uno para hacer una colección de ellos. Mientras yo hacía la recopilación de los panfletos, los que me miraban se reían y, otros, se burlaban. Pero uno me preguntó qué iba a hacer yo con ellos. Entonces le contesté: "los leeré, y veré si están a la ley y al testimonio". Entonces me contestó: "oh, pues llévate este, y ve qué te parece". Yo leí su título y decía: "¿Cuántos dioses hay? ¿uno, dos o tres?" Le dije: "hermano, no voy a llevarme ese panfleto, eso no es de Dios". Me miró y se encolerizó, y me dijo: "¿no quieres saber la verdad?" Le dije: "hermano, ya la sé referente a esto, el mismo Dios me lo ha revelado. Son tres, unidos en el plan de salvación del ser humano: el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. No están fusionados en un solo cuerpo, son tres seres, tres personas independientes y no hay discusión en eso, eso es la ley y los testimonios". Pero él insistía con gran hostigamiento y cada vez se volvía más agresivo. Se acercó más a mí y escuché una voz que me dijo: "apártate, deja todos los panfletos y sal". Solté los panfletos, y mientras salía dije: "Señor, ¿por qué?, son tu palabra". Y me contestó: "sí, son verdades muy importantes, pero están amalgamadas con la opinión humana. No escuchéis hombres. Yo educo a mi pueblo en estos días. Yo no solo veo sus escritos, sino que veo su corazón y las intenciones del mismo". {Daisy Escalante: 14-09-2019 #01, es.p3}

Una persona llegó donde mí y puso en mi mano otros panfletos, y me dijo: "salvé estos mensajes, para que muchos los escuchen, estos son íntegros: a la ley y al testimonio". Ella lloraba, y le dije: "venga conmigo". Más me miró y me dijo: "debo, debo convencerlos". Le dije: "no hay tiempo, es hora de salir, vámonos". Más ella me miró, y me dijo: "aquí está mi familia". Y corrió hacia ellos. Pregunté: "Señor, ¿qué hago con estos panfletos?" Me contestó: "llévalos". Yo los leía por el camino. Eran sólo escritos de la Biblia y del Espíritu de Profecía, no había más opinión humana, solamente esto, allí. {Daisy Escalante: 14-09-2019 #01, es.p4}

Se veía en ellos amor, se veía en ellos paz, se veía en ellos justicia y verdad. Comencé a hablar las palabras de estos panfletos. En ese momento escuché un fuerte estruendo, era un viento recio que llegó hasta donde yo estaba, y al mirar atrás, vi que el edificio de donde había salido estaba en el suelo, y todo estaba desolado. Me dijeron: "corre". Corrí, corrí, y la orden era: "lee". Leí y otros se sumaban a mi correr, y fuimos a las montañas, y tras nosotros la tempestad arreciaba. Dije: "Señor, tus juicios sobre ellos". Me contestó: "hubo mucha evidencia, ellos sabían, más la indecisión, la dilación, la conveniencia propia y su orgullo no les dejó avanzar. Ellos se condenaron a sí mismos". Lloré amargamente, fue fuerte, muy fuerte la impresión para mí, porque todo el que quedó atrás fue desaparecido. No quedó nada, todo quedó desolado. {Daisy Escalante: 14-09-2019 #01, es.p5}

En ese momento me dijeron: "lee Jeremías 4". Mientras buscaba Jeremías 4, amados hermanos, en ese momento también se me dijo otro texto: "Apocalipsis 4:8". Quiera Dios que podamos entender, que podamos avanzar, y que podamos hacer la voluntad del Señor. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 14-09-2019 #01, es.p6}

"1Si te has de convertir, oh Israel, dice Jehová, conviértete a mí; y si quitares de delante de mí tus abominaciones, no andarás de acá para allá. 2Y jurarás, diciendo: Vive Jehová, en verdad, en juicio y en justicia; y las naciones se bendecirán en Él, y en Él se gloriarán. 3Porque así dice Jehová a todo varón de Judá y de Jerusalén: Haced barbecho para vosotros, y no sembréis entre espinos. 4Circuncidaos para Jehová, y quitad los prepucios de vuestro corazón, varones de Judá y moradores de Jerusalén; no sea que mi ira salga como fuego, y se encienda y no haya quien [la] apague, por la maldad de vuestras obras. 5Anunciad en Judá, y publicad en Jerusalén, y decid: Tocad trompeta en la tierra. Pregonad, juntaos, y decid: Reuníos, y entremos en las ciudades fortificadas. 6Alzad bandera en Sión, juntaos, no os detengáis; porque yo hago venir mal del norte, y destrucción grande. 7El león sube de su guarida, y el destructor de los gentiles viene en camino; ha salido de su lugar para tornar tu tierra en desolación; tus ciudades quedarán en ruinas, y sin morador. 8Por esto vestíos de cilicio, endechad y aullad; porque la ira de Jehová no se ha apartado de nosotros. 9Y será en aquel día, dice Jehová, que desfallecerá el corazón del rey, y el corazón de los príncipes, y los sacerdotes estarán atónitos, y se maravillarán los profetas. 10Y dije: ¡Ay, ay, Jehová Dios! verdaderamente en gran manera has engañado a este pueblo y a Jerusalén, diciendo: Paz tendréis; pues la espada ha venido hasta el alma. 11En aquel tiempo se dirá de este pueblo y de Jerusalén: Viento seco de las alturas del desierto vino a la hija de mi pueblo, no para aventar, ni para limpiar. 12Viento más vehemente que éste vendrá a mí; y ahora yo pronunciaré juicios contra ellos. 13He aquí que subirá como nube, y su carro como torbellino; sus caballos son más ligeros que las águilas. ¡Ay de nosotros, porque hemos sido saqueados! 14Lava tu corazón de maldad, oh Jerusalén, para que seas salva. ¿Hasta cuándo permanecerán en medio de ti los pensamientos de iniquidad? 15Porque una voz proclama desde Dan, y anuncia calamidad desde el monte de Efraín. 16Decid a las naciones; he aquí, haced oír sobre Jerusalén: Guardas vienen de tierra lejana, y darán su voz sobre las ciudades de Judá. 17Como guardas de campo, estuvieron contra ella en derredor, porque se rebeló contra mí, dice Jehová. 18Tu camino y tus obras te hicieron esto, ésta [es] tu maldad; por lo cual amargura penetrará hasta tu corazón. 19¡Mis entrañas, mis entrañas! Me duelen las fibras de mi corazón; mi corazón se agita dentro de mí; no callaré; porque voz de trompeta has oído, oh alma mía, pregón de guerra. 20Destrucción tras destrucción es anunciada; porque toda la tierra es devastada; de repente son destruidas mis tiendas, en un momento mis cortinas. 21¿Hasta cuándo he de ver bandera [y] he de oír sonido de trompeta? 22Porque mi pueblo es necio; no me han conocido, [son] hijos ignorantes y sin entendimiento; [son] sabios para mal hacer, pero hacer el bien no lo saben. 23Miré la tierra, y he aquí que [estaba] desordenada y vacía; y los cielos, y no había en ellos luz. 24Miré los montes, y he aquí que temblaban, y todos los collados fueron destruidos. 25Miré, y no [había] hombre alguno, y todas las aves del cielo se habían ido. 26Miré, y he aquí la tierra fértil [era] un desierto, y todas sus ciudades estaban asoladas a la presencia de Jehová, delante del furor de su ira. 27Porque así dice Jehová: Toda la tierra será asolada; mas no haré consumación. 28Por esto se enlutará la tierra, y los cielos arriba se oscurecerán, porque hablé, [lo] determiné, y no me arrepentiré, ni me retraeré de ello. 29Por el estruendo de la gente de a caballo y de los arqueros huirá toda la ciudad; entrarán en las espesuras de los bosques y subirán a los peñascos; todas las ciudades serán abandonadas, y no quedará en ellas morador alguno. 30Y tú, desolada, ¿qué harás? Aunque te vistas de grana, aunque te adornes con atavíos de oro, aunque pintes con antimonio tus ojos, en vano te engalanas; te menospreciaron tus amantes, buscarán tu vida. 31Porque oí una voz como de mujer que está de parto, angustia como de primeriza; voz de la hija de Sión que lamenta y extiende sus manos, [diciendo]: ¡Ay ahora de mí! que mi alma desmaya a causa de los asesinos." {Jeremías 4}

"8Y los cuatro seres vivientes tenían cada uno seis alas alrededor, y por dentro estaban llenos de ojos; y no reposaban día y noche, diciendo: Santo, santo, santo, Señor Dios Todopoderoso, que era, y que es, y que ha de venir." {Apocalipsis 4:8}